¿Sabías que el hombre en la antigüedad utilizó los espacios cerrados en cavernas para conservar ciertos alimentos?, ¿y que dichos espacios tenían entradas y salidas de aire natural que permitían el milagro de la refrigeración?... ¿quieres conocer más?
Desde los tiempos más remotos el hombre utilizo a un nivel empírico, el uso de los espacios cerrados que, permitían conservar determinados alimentos a una temperatura menor a la del medio ambiente. Por lo general, dichos espacios eran cavernas que al tener entrada y salida de corrientes de aire natural permitían el milagro de la conservación.
Otro uso de los espacios fríos en la antigüedad lo llevaron a cabo los egipcios al colocar sus granos a las orillas del río Nilo, para conservar determinadas cosechas en tiempos de sequía. En la América precolombina, los emperadores aztecas organizaban grupos de individuos para su servicio exclusivo, que desempeñaban la tarea de llevar hielo a los cráteres de los volcanes no activos, cercanos al Valle de México, para la conservación de sus cultivos. Este hielo de los glaciares de las montañas nevadas también fue utilizado por los griegos y los romanos.
En el siglo XIX, la refrigeración artificial fue un producto de la industrialización. El refrigerador actual es el resultado de más de un siglo de evolución. La construcción del primer refrigerador artificial se le atribuye al ingeniero francés Carlos Tellier, en el año de 1863, que por sistema licuefacción, logró bajar la temperatura a -79 grados Celsius. Dos años más tarde creó su primera máquina frigorífica a circulación de gas amoníaco líquido, para la producción del frío de uso doméstico e industrial. Esta invención, que transformó al mundo moderno, fue mejorada en 1865. Años posteriores construyó una máquina de compresión mecánica a gas líquido y la instaló en la fábrica del maestro chocolatero Menier en Francia.
Después de considerar los puntos anteriores surge inevitablemente esta pregunta: ¿por qué en la actualidad se hace más indispensable el uso de la refrigeración que en la antigüedad? Tal vez pueda responderse con la siguiente explicación. Anteriormente los rayos solares caían sobre la Tierra y eran absorbidos por el suelo, ya que éste se encontraba en su forma natural. En las ciudades actuales, el uso del asfalto y del cemento en general, y el espaciamiento entre los pisos y los techos de las casas, no permiten que el calor de los rayos solares se absorba, sino que, por el contrario, hacen que éste rebote. Cuando el calor sube, la densidad la densidad del humo-niebla (smog) en el aire lo detiene y lo rebota hacia el piso (efecto invernadero). Esta concentración de aire caliente es lo que hace que sea indispensable el uso de los refrigeradores domésticos y aires acondicionados.